Esta red de fraudes operaba a través de aplicaciones financieras digitales que ofrecían préstamos con muchas facilidades; por ejemplo: sin verificar la información en el buró de crédito o con menos requisitos
No hay datos de denuncias en la Fiscalía General del Estado por extorsiones o fraudes relacionados con los llamados ‘montadeudas’, cuya red también cometía estos delitos en Querétaro, señaló Fátima Colín, suboficial de la Unidad de la Policía Cibernética de la Ciudad de México, a Presencia Universitaria, pues no se realizaron operativos con otras entidades, ya que la intervención de los call centers, dedicados a estos fraudes, se hizo solo en la capital del país. Sin embargo, aseveró que quien ha sido víctima de este delito en el estado, puede presentar una denuncia en su institución más cercana.
Esta red de fraudes operaba a través de aplicaciones financieras digitales que ofrecían préstamos con muchas facilidades; por ejemplo: sin verificar la información en el buró de crédito o con menos requisitos; lo que volvía sus propuestas atractivas. Aunque no detalló hasta cuánto dinero exigían a las personas, señaló que los montos de los préstamos podían no ser tan altos; sin embargo, con el cúmulo de intereses, las deudas se volvían impagables.
Por ello, Colín instó a que se presenten denuncias para que puedan iniciarse las investigaciones correspondientes. “Llevando sus evidencias: capturas de pantalla para que realicen la denuncia. Esto es muy importante para que exista un proceso legal, debe haber una investigación. Esta investigación se inicia cuando hay una denuncia. Es muy importante que las personas que hayan sido víctimas acudan”, aseveró.
Colín emitió una serie de recomendaciones a la población, al momento de descargar aplicaciones, tales como verificar el tipo de comentarios que tiene, la cantidad de descargas, la calificación que le dan otros usuarios, además de leer los términos, condiciones y las políticas de uso, así como poner atención en los permisos y el acceso que solicitan. Esto aunado a “no dejarse llevar” por publicaciones de préstamos atractivos, pues estos pueden ser un gancho para un fraude.