FOTO| Ángel Rodríguez
El libramiento Sur Poniente ha sido señalado como una de las vialidades más peligrosas para transitar por parte de peatones, ciclistas y automovilistas en el estado de Querétaro.
Tan solo del 2012 al 2017, la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT), en conjunto con el Instituto Mexicano del Transporte, reportaron un total 313 accidentes, 22 fallecidos y 92 lesionados; es decir un promedio de 62 accidentes, 18 lesionados y 4 muertes al año en esta vialidad.
Al tomar en consideración dichas cifras, de las 332 muertes que reportó el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública por accidentes vehiculares, 4 sucedieron en el libramiento Sur Poniente.
Además, recordar que el pasado fin de semana se dio a conocer por parte de medios locales la muerte de dos ciclistas, además del sin fin de accidentes, volcaduras y muertes que se reportan semana con semana.
Cabe destacar que el libramiento Sur Poniente es una carretera estatal ubicada en las inmediaciones del municipio de Querétaro y Corregidora, la cual inicia en el cruce de la carretera a Huimilpan y finaliza en la intersección de la carretera federal 57 a San Luis Potosí.
En un recorrido desde la carretera estatal de Huimilpan hasta el entronque de la carretera a Irapuato, tan solo hay un aproximado de 5 puentes peatonales; no hay ciclovías ni transporte público, además de que los automovilistas exceden los límites de velocidad, no son visibles las señalizaciones y falta iluminación.
En los dos carriles de circulación que hay en cada uno de los sentidos se puede observar que, a pesar de que el límite de velocidad es de los 60 kilómetros por hora, este se sobrepasa por la mayoría de los vehículos, ya que llegan a reportar velocidades por encima de los 120 kilómetros por hora.
En cuanto al transporte público, si bien pasa la ruta complementaria C23 y la 98, estas solamente llegan a la zona de La Negreta y se desvían en el puente de Santa Bárbara, por lo que la zona de Misión Mariana y los Fraccionamientos como Punta Esmeralda y Colinas del Bosque quedan incomunicados del transporte público.
Respecto a los peatones, en los tramos se observa que la mayoría de ellos caminan por los acotamientos y baldíos que se encuentran en la zona; además de que suelen cruzar el libramiento sin utilizar los puentes peatonales, ya que pueden estar a una distancia de uno hasta los 3 kilómetros.