El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) no ha cumplido con lo indicado por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en el caso de Vanessa Dib Velásquez, quien fue víctima de varios actos de negligencia médica en 2018, errores que derivaron en que fuera sometida a cinco amputaciones, entre las que se incluyeron ambas piernas, y sufriera muerte clínica por media hora.
Negligencia Médica
La CNDH emitió una recomendación en la que pidió al IMSS una disculpa pública por parte del personal involucrado, una indemnización, la cobertura de gasto de sus prótesis y de educación para ella y sus hijos; no obstante, sólo esto último se ha cumplido parcialmente.
Orillada a deuda
Al acudir al IMSS, comentó, le pidieron que ella cubra el gasto de la renovación de sus prótesis para presentar una factura con base en la cual le reembolsarían los gastos: situación que ella no puede solventar. Inclusive, dijo, su abogado tuvo que prestarle alrededor de $1 mil 500 pesos para solventar por su cuenta partes de las prótesis que requieren renovarse. No obstante, pronto también tendrá que renovar otras piezas de las prótesis que en conjunto cuestan alrededor de $10 mil pesos: una cantidad que tampoco puede solventar.
Pese a que recae en el IMSS la responsabilidad ética de facilitarle atravesar la situación a la que la han llevado, sólo se ha complicado más debido a que la institución no ha cumplido con la recomendación de la CNDH: ni con la disculpa pública ni indemnización, como tampoco el pago de sus prótesis.
Añadió que además está esperando un aumento en su pensión ya que la cantidad actual de la pensión es insuficiente para cubrir sus necesidades básicas, y la falta de cumplimiento de las recomendaciones le ha generado dificultades financieras y de movilidad.
“Yo decía que si me reparaban el daño, gané también el aumento de pensión, que tampoco se me daba, sigo con un mínimo que son menos de 3 mil pesos mensuales para vivir, porque para ellos es la cantidad con lo que creen que uno vive, y la otra es la reparación de daños que entra como en la indemnización, yo decía que si ya me podían apoyar con terminar con lo de la indemnización y el aumento de pensión, pues, a lo mejor mis posibilidades de pagarle al ortopedista serían más buenas, podría yo desembolsar el dinero en cuanto a la necesidad y pedir solo la reposición del gasto más adelante”, lamentó Vanessa Dib Velásquez.
La recomendación fue informada a Vanessa en abril de 2022 y hecha pública en junio y desde entonces han sido muy pocos los avances en el cumplimiento por parte del IMSS.