La presidenta de la LXI Legislatura, Andrea Tovar Saavedra, calificó como una «afirmación sin sustento» los señalamientos de su compañero de bancada, el diputado Homero Barrera McDonald, quien la acusó de retrasar intencionalmente la aprobación de la reforma judicial en Querétaro.
El legislador de Morena sostuvo que la demora podría impedir la elección de magistrados y jueces locales en 2025, y señaló un posible conflicto de intereses, argumentando que Tovar Saavedra es trabajadora con licencia del Poder Judicial estatal.
Sin embargo, la presidenta del Congreso rechazó estas acusaciones y aseguró que el proceso sigue su curso conforme a la ley y declaró que la acusación parece más “un chisme” que un argumento.
Iniciativa
Tovar Saavedra explicó que la segunda iniciativa presentada por diputados de Morena el pasado 24 de febrero requiere un nuevo proceso legislativo, pues modifica el marco jurídico y las leyes secundarias, lo que obliga a notificar nuevamente a los municipios de Querétaro.
Sobre la posibilidad de aprobar la reforma antes del 15 de marzo, la legisladora indicó que el Congreso aún tiene tiempo y que el tema está en manos de las Comisiones Unidas, cuyo presidente es el propio Homero Barrera.
Tensión al interior
Ante la pregunta sobre si esta situación podría generar confrontaciones dentro de Morena, Tovar Saavedra negó cualquier división y consideró que sus declaraciones en torno a volver a iniciar el proceso legislativo por la nueva reforma ingresada, fueron tomadas “de manera personal” cuando sólo se está hablando de lo que dicta el proceso legislativo.
Finalmente, la diputada reiteró su compromiso con el avance de la reforma y aseguró que su papel es ceñirse a la ley orgánica del Congreso, descartando cualquier intención de obstaculizar la iniciativa.