El albergue municipal de Cadereyta requiere de un guardia de seguridad en la entrada para tener un mayor control del acceso, consideró Guillermina Olvera directora de dicho espacio de amparo.
“Necesitamos una persona que esté más al pendiente allá afuera, un vigilante”, señaló la directora. Detalló que ocasiones se han presentado situaciones donde personas que no tienen familiares en el hospital general son insistentes en hospedarse y cuando se les explica que el albergue solo es para uso de familiares hospitalizados, adoptan actitudes negativas, “Quieren que los dejen quedarse a la fuerza porque es un albergue”, agregó.
“No podemos tampoco meter a gente que viene de la calle o anda en la calle, que luego vienen y que se queden a dormir, porque no sabes las condiciones en las que llega la persona. Tú no lo puedes pasar y no sabes que le vaya a hacer a la gente que tienes aquí adentro”, señaló. Durante su cargo como directora de la institución este es el único inconveniente que han presentado, dijo; por lo que considera que un personal extra para hacer guardia y evitar situaciones de esta índole, abonaría en la seguridad del albergue municipal.