Foto| Ruth Soto
Expertos en salud hacen un llamado a la población a la prevención de enfermedades relacionadas con el incremento de la temperatura. Con la llegada de la temporada de calor, prestar atención a la alimentación se vuelve crucial para mantener la salud y el bienestar. Las elevadas temperaturas no solo aumentan la sensación de cansancio y deshidratación, sino que también pueden comprometer la seguridad de los alimentos y elevar el riesgo de enfermedades.
Recomendaciones
Una de las principales recomendaciones que la nutricionista dietista del IMSS Querétaro, Verónica Tamayo Silva, expresa durante esta temporada es incrementar la ingesta de líquidos para prevenir la deshidratación, que puede manifestarse con síntomas como mareos, dolor de cabeza y fatiga. Además del agua, el consumo de frutas y verduras ricas en agua, como sandía, melón, pepino y tomate, puede ayudar a mantener el cuerpo hidratado.
‘’Esto nos ayuda mucho a asegurar que no tengamos ninguna enfermedad diarreica, por ejemplo, las frutas son una buena elección para hacer aguas de sabor una vez al día, de preferencia se recomienda no endulzar para no acostumbrarnos y no generar el vicio nuevo de la azúcar añadida», afirmó Verónica Tamayo Silva.
Se llama a que preferentemente, se consuman alimentos en lugares acreditados, cerrados y que las personas que los atienden sean diferentes a las que cobran y que exista acceso al lavado de manos con agua y jabón. En el hogar, se debe procurar el consumo de alimentos desinfectados, alimentos bien cocidos para evitar cuadros diarreicos y gastrointestinales.