La Asociación de Colonos Quercus AC denunció presunto fraude por incumplir lo establecido en el proceso de compra-venta de terrenos por parte de la inmobiliaria Grupo Desarrollador Camelot en los fraccionamientos Quercus El Encino Residencial y El Encino, declaró el abogado de esta asociación, Luis Sánchez Sánchez.
Aseguró que los fraccionamientos mencionados no tienen claves catastrales ni escrituras y por lo tanto, no existe certeza jurídica en los terrenos vendidos, sin embargo, la desarrolladora si cobró a los habitantes las escrituras con lo referente al pago de impuestos, honorarios y traslados de dominios a pesar de no se contaba con todos los documentos necesarios para poder escriturar.
“Que tenía un campo de golf, y por lo tanto, lo desapareció para considerarlo como macrolotes vendibles, circunstancia que nos causó un agravio, incluso, una aparente conducta de delito, en virtud de que posterior a este fecha, en 2016, 2017, 2018, se comienza a hacer la venta de los lotes con la promesa de un campo de golf, esto es en cuanto a la primer sección, en cuanto, a la segunda sección, Quercus, se comenzó a hacer ventas de los lotes, sin ninguna infraestructura, sin ningún desarrollo, sin ningún permiso, incluso hoy nos enteramos de que no tenían los permisos necesarios”, denunció Luis Sánchez.
Añadió que después de 11 años, no se han podido terminar las obras de los fraccionamientos y por lo tanto, no se han podido entregar al municipio de Huimilpan, que es la demarcación de donde se ubican; los colonos argumentan que han pagado por 7 años el impuesto del predial a pesar de que los documentos mencionados presentan irregularidades.
Agregó que la propia desarrolladora les ha cobrado a los colonos los servicios básicos como la luz, agua, gas, entre otros.
Aseguraron los colonos que no se han cumplido los compromisos que hizo la desarrolladora al momento de vender estos terrenos, e inclusive, el campo de golf en el fraccionamiento Country Club y Golf, ya no existe, ya que fue eliminado, e inclusive, jurídicamente, el nombre de este fraccionamiento cambió a El Encino; lo anterior mencionado ocurrió en el año 2013.
Respecto a las escrituras, argumenta el abogado que las notarias 10, 18 y 2 las firmaron a pesar de las irregularidades mencionadas, además de tener el conocimiento de la inexistencia del campo de golf, el cual había sido prometido en los procesos de compra-venta.
Son alrededor de 80 familias que viven en estos fraccionamientos y las cuales han pedido respuestas de la inmobiliaria, sin embargo, no las han obtenido.
Cabe señalar que el costo de estos terrenos oscilaron entre los 800 mil a 1 millón de pesos.
Aseguró uno de los colonos que la desarrolladora está ofreciendo a los habitantes del lugar firmar unas escrituras, en las cuales se indican que deben de renunciar a lo prometido por la misma en el proceso de compra-venta, como por ejemplo el campo de golf, una casa club con alberca, un club hípico, una cancha de tenis, un gimnasio, una pista de jogging, un parque lineal y una banda perimetral.