La inscripción de las tradiciones que se realizan en la Peña de Bernal como Patrimonio Cultural Inmaterial por parte de la Unesco está en riesgo: Los integrantes del Concejo Indígena Otomí-Chichimeca pidieron a las instancias gubernamentales que informen los avances del plan de salvaguarda de Bernal como territorio sagrado.
El reconocimiento que hizo la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO, por sus siglas en inglés) en 2009 a este sitio como Lugar de memoria y tradiciones vivas de los pueblos Otomí-Chichimecas de Tolimán y como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad implicaba el desarrollo de un plan de salvaguarda para la Peña de Bernal.
Tras documentar daños al monolito, sitio en el que se preservan las tradiciones a la Santa Cruz que merecieron el reconocimiento mencionado, los integrantes del Concejo Indígena Otomí-Chichimeca denunciaron ante la UNESCO la falta de mantenimiento y control sobre el uso del territorio ancestral.
Genaro Nieves, representante del Concejo, aseguró que la falta de acciones por parte de las autoridades locales y estatales en materia de Turismo y Cultura pone en riesgo la permanencia del sitio en el listado de la UNESCO.
“El último que se actualizó fue en el 2019, y lo que nos decía en este tema, tampoco lo quería tocar el secretario del Ayuntamiento, que no era para eso, nos comentó que se firmó el año pasado el convenio para el plan de salvaguarda para darle continuidad, han pasado más de 12 meses y no has hecho nada, ese es el punto, no se ha logrado aterrizar nada”, afirmó Genaro Nieves, representante del Concejo Indígena Otomí-Chichimeca.
Si bien el reconocimiento de Bernal indica que forma parte del Patrimonio Cultural Inmaterial, la falta de cuidado del monolito como el espacio para la celebración de las tradiciones pone en riesgo las peregrinaciones de los escaloneros, herederos de la tradición de los pueblos Otomí-Chichimecas.
“Nosotros el 18 de mayo presentamos una denuncia ante la UNESCO, y en este julio nos contesta, y nos vuelven a contestar ahora en agosto, donde el municipio tiene hasta el 31 de agosto para que acredite los avances sobre el plan de salvaguarda”, informó Genaro Nieves, representante del Concejo Indígena Otomí-Chichimeca.
Genaro Nieves agregó que las autoridades están en proceso de conformar el Consejo Administrativo del Área Natural Protegida, lo que también pone en riesgo sus tradiciones ya que esto implicaría que los escaloneros pidan permiso para acceder a la peña, siendo que antes era a ellos a quienes se debía hacer esta solicitud.