La Jornada Nacional de Búsqueda realizada por familiares de personas desaparecidas en Querétaro ha significado frustración e impotencia para las madres que, con esperanza, viajaron de diferentes puntos de la República para poder tener algún indicio: La actitud de las autoridades queretanas hacia las madres buscadoras fue indolente y negligente, acusaron; lo que demuestra la falta de empatía y compromiso para abordar la situación de manera adecuada, luego de negarles acceso a expedientes de Centros de Rehabilitación Social (Cereso), del Servicio Médico Forense (Semefo) e incluso agredirlas físicamente al protestar por acceso a los mismos.
Frustración
La reciente Jornada Nacional de Búsqueda, que tuvo lugar del 16 al 30 de agosto en Querétaro, ha dejado una sensación de desolación y desesperación entre las madres provenientes de diferentes lugares del país: «Frustración» parece definir su experiencia. Con esperanzas y corazones anhelantes, estas madres afrontaron la ardua tarea de buscar a sus seres queridos en un contexto ya cargado de dolor e incertidumbre. Sin embargo, encontraron una serie de obstáculos en su camino, según indicó Yadira González, de Desaparecidos Querétaro y anfitriona de las madres buscadoras.
«Seguimos en la exigencia de la verdad, en la exigencia de la no violación de nuestros derechos, no venimos a ser violentadas, ni lastimadas, Querétaro es el único estado en donde nos ha sucedido esto, durante todos los años que tiene trabajando la Búsqueda Nacional en Vida; estas madres y padres, no merecen, ser tratados de esta manera tan vil, tan organizada, como si fuera una acción de los años de la Guerra Sucia, como si fuera una acción del 68, como un halconazo, porque así fue, así nos trataron, esas fueron las mismas prácticas que utilizó la Fiscalía de Querétaro para contra las madres buscadoras que solamente buscamos la verdad, y regresar a nuestros hijos, hijas, esposos, a su casa», destacó Yadira González.
Fiscalía: Más daño que ayuda
Yadira González busca a su hermano Juan González, visto por última vez el 15 de junio del 2006 en Los Ángeles, Corregidora, y se ha vuelto una voz fuerte contra las irregularidades, ineficiencias y fallas en las investigaciones de los casos de desapariciones en Querétaro; así como Juan Vázquez, que busca a su hija desaparecida en Querétaro desde hace más de 10 años, quien señaló que la Fiscalía General del Estado de Querétaro no los ha atendido nunca, ni ahora en la Jornada, ni antes. Consideró que le apuestan por ignorar el problema, como si ignorándolo se resolviera.
“Y parte de nuestra búsqueda ha sido tanto en campo como en vida y denotando que nuestras autoridades son omisas, a eso se debe este plantón, en esta marcha, porque cometen la grosería de no atendernos cuando es su deber es parte de las funciones del estado, cualquier desaparecido tiene derecho a ser buscado, pero, aquí en Querétaro como que eso simple y sencillamente no, para ellos no funciona, la Fiscalía es omisa, es dilatoria, simplemente nos ignora cuando sabemos que es su deber, todo indica a que apuestan porque ignorando el problema a lo mejor lo resuelve, pero no, por eso estamos hoy en la fiscalía”, manifestó Juan Vázquez.
La mano de la justicia
La actitud de las autoridades queretanas hacia estas madres buscadoras ha resultado sumamente desalentadora, actitud que refleja una preocupante carencia de empatía por parte de las autoridades hacia el sufrimiento y la angustia de estas familias que únicamente buscan respuestas y justicia.
La falta de compromiso de las autoridades para abordar esta situación de manera adecuada resulta evidente, al negarles el acceso a expedientes y aún más grave al recurrir a la agresión, como la sufrida el pasado 21 de agosto mientras hacían un plantón frente a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado. El ataque que sufrieron, que incluyó golpes a menores, atropellamiento, violencia sexual y amenazas, fue recordado por Yadira.
«A ellas también las golpearon, yo en el afán de tratar de defenderlas, fui encapsulada por 5 mujeres, estaba transmitiendo en vivo, cuando una de las mujeres me pasa la mano por atrás, para que no pudiera defenderme con una mano y seguir grabando con la otra y un hombre llegó, me apretó un seno de manera muy fuerte, que hizo que soltara el teléfono y con la mano botó mi teléfono, y después lo pateó y lo piso rompiendo el celular, mientras eso estaba pasando, a otras compañeras también las estaba golpeando, a los compañeros les aventaron las camionetas encima, atropellaron a uno de ellos, les pegaron con palos», reportó Yadira González.
De la vista gorda
La indiferencia hacia sus demandas y necesidades refuerza la percepción de desconexión entre las instituciones y la realidad de las personas que están siendo víctimas de crímenes. Esto no solo perpetúa la sensación de impotencia en estas madres, sino que también subraya las deficiencias en el sistema de justicia y búsqueda de personas desaparecidas.
Lucy López Castruita, coordinadora de Búsqueda Nacional en Vida y que busca a su hija Irma Claribel Lamas López (que desapareció el 13 de agosto de 2008 en Coahuila), recordó que la Fiscalía ignoró sus solicitudes, incluso después de haber sido agredidas.
«No para nada, desde un principio no se han comunicado para nada, nada más el comunicado que nosotros vimos que ellos lanzaron el primer día, es todo y ayer pues ya estuvieron en total silencio, y también eso nos preocupa porque tanto silencio, porque no hay una respuesta porque siguen así, que se planea, o que está pasando o totalmente ignorados», lamentó Lucy López Castruita.
Obstrucción por la justicia
Maribel Salas Salas, madre que viene de Coahuila a buscar a su hijo Jesús Alán desaparecido desde el 2012, señala que a más de 10 años de la desaparición de su hijo no hay avances. Solo ve que el expediente crece, pero sin datos confiables. Es por esto fundamental que ella haga su propia búsqueda e investigación.
“Nada más el expediente crece, porque estaba así, y ahora que fui a Reynosa está así, pero yo no veo nada claro», compartió Maribel Salas Salas.
El Poder
La actitud problemática de las autoridades queretanas hacia las madres buscadoras tiene un impacto emocional y psicológico considerable en ellas.
“Cuántas personas están lesionadas, pues todos, agarraron parejo, el tema es que son golpes internos, musculares, jaloneos, vejaciones sexuales, hubo amenazas, pero también los golpes que nos pudieron haber dado no se comparan al daño psicológico que ejercieron, en esa violencia psicológica que ejercieron”, afirmó Yadira González.
Cada una cargaba con la esperanza de obtener algún indicio, una pista como Socorro Gil Guzmán, quien busca a su hijo Jonathan. Él fue víctima de desaparición forzada en Acapulco, Guerrero, a manos de policías. Aunque su hijo no desapareció en Querétaro, Socorro Gil Guzmán señala que podría estar en cualquier lugar. Ese anhelo la hace recorrer toda la República.
“La misma Fiscalía se encargó de desaparecerme todas las pruebas que había en la carpeta, yo vengo de Guerrero, venimos de diferentes estados de la República, mi hijo iba a jugar futbol el día que se lo llevaron, para nosotras las madres es importante hacer estas brigadas”, denunció Socorro Gil Guzmán.
Para Mirna Lucía Rico, que busca a su hijo Rodrigo, la cercanía de la entidad con la Ciudad de México —donde desapareció su hijo en septiembre de 2019— le da motivos para unirse a la Búsqueda Nacional y buscar aquí a su hijo.
“El desapareció, iba a Chalma en una peregrinación, despareció en medio del Ajusco, en el 2019, el 28 de septiembre, el cual Fiscalía no ha hecho nada, vine al Semefo a Querétaro y no nos abrieron las puertas, no nos quieren abrir las puertas, ni a penales, ni a los semefos, ni a periciales, por eso, necesitamos que hoy que nos unimos a Búsqueda en Vida, con todos los estados pedimos que nos lo abran, yo dejé a mi familia, a mis hijos, mi trabajo, todo por venir en búsqueda de mi hijo, hasta encontrarlo, vivo o muerto, pero hasta encontrarlo”, compartió Mirna Lucía Rico.
Institución
En última instancia, la lucha de estas madres en la Jornada Nacional de Búsqueda resalta la necesidad urgente de un enfoque más humano y compasivo por parte de las autoridades. Cada historia detrás de una persona desaparecida merece respeto, atención y apoyo. Es crucial que las instituciones encargadas demuestren una verdadera voluntad de colaborar y trabajar en conjunto con estas familias que han sufrido una pérdida inimaginable: Sensibilidad que tiene esta madre de Veracruz que encontró a su hijo Iván, aunque desgraciadamente sin vida, pero que luego de haber vivido en carne propia sigue acompañando a las madres y solicita le entreguen a su hijo completo.
«Sigo peleando porque lo sacaron con vida, lo sacaron completo, ellos me entregaron lo que supuestamente entre comillas encontraron, las exhumaciones no se hicieron bien, debe de haber más restos de Iván, yo peleo porque mi hijo que me lo entreguen completo, ya que lo desparecieron, lo cercenaron, no es justo que me lo entregaron incompleto, seguimos en la lucha hasta que se haga justicia por Iván, porque Iván no era ningún delincuente, ni un vicioso, nada, él acababa de venir de trabajar, estaba estudiando el segundo semestre del bachillerato”, resalto la madre de Iván.
Lo contrario de la ley
Es esencial que las autoridades muestren un compromiso genuino hacia la búsqueda de la verdad y la justicia en estos casos. Deben tratar a las madres buscadoras con respeto y brindarles el apoyo necesario para lograr sus objetivos, como afirmó Juan Carlos Trujillo Herrera, Coordinador de la Red Nacional de Enlaces. Sin embargo, hasta el momento ha sido todo lo contrario.
“Es triste lamentable ver como en un proceso de construcción de paz, a nivel nacional, no solo en Querétaro, hoy en ese intento, en poder generar una colaboración, porque es una colaboración que, además, lo marca la ley general de desaparición forzada, donde permite a las familias como coadyuvantes, de un proceso de búsqueda de nuestros familiares, que hoy instituciones como la Fiscalía del Estado en esa mirada de hermetismo, cuidado, y cuidado no sabemos que cosas, cuando me refiero a cuidado, pueden entender sobre un cuidado interno en la parte de la investigación, tenemos más de 15 años que no se investigado, y si se investigara creo que no tendríamos que estar haciendo este tipo de acciones las familias y en este ejercicio hemos dejado de lado la justicia, para intentar desde la propia necesidad, de la sociedad civil, organizarnos para ser labores de reconstrucción del país», sostuvo Juan Carlos Trujillo Herrera.
Por su parte, la Fiscalía General del Estado (FGE) a cargo de Alejandro Echeverría Cornejo, desde un inicio intentó justificar el actuar de sus elementos y luego culpó a los concertadores del gobierno estatal de la represión sufrida. Mientras que el gobernador del estado, Mauricio Kuri González, durante los hechos no estaba en la entidad, sino en una gira en Colombia, y se limitó a solicitar a las familias pruebas de la represión sufrida.
“Por parte de gobierno del estado, tienen todo el apoyo, que nos den lo que necesiten y se estará buscando en la medida de lo posible, sin confrontaciones, me decía Lupita Murguía que el día de ayer, por la tarde que fue muy respetuosa por ambas partes, lo que yo sí les puedo decir es que no hemos visto, o por lo menos, yo no he visto, ninguna digamos video, o alguna prueba que se haya lastimado o algo, pero si ellos lo tienen que lo presenten”; refirió Mauricio Kuri.