Por: Alan Valdez
Jorge Antonio Guerrero Quintanar, productor de maguey en la comunidad de Boyé, en Cadereyta de Montes, explicó los retos que enfrenta la siembra del agave debido a las condiciones climáticas: La sequía prolongada, las plagas y las lluvias intensas son factores que han afectado al desarrollo de los cultivos y, aunque las lluvias recientes han sido favorables, el exceso de humedad también representa otro desafío.
El productor explicó que estuvo a punto de regar los magueyes con botellas de agua debido a la sequía de los últimos dos años. Sin embargo, las lluvias de mayo y septiembre favorecieron las plantaciones, aunque el exceso de humedad también ha dañado los cultivos, creando un nuevo obstáculo para los productores de agave.
Plagas
Guerrero Quintanar destacó que la plaga conocida como “el picudo”, un gorgojo que daña las plantaciones en su etapa adulta y larval, ha sido un problema constante debido a la falta de lluvia. Señaló que, aunque recientemente han recibido productos naturales para combatir esta plaga, no ha sido suficiente, y muchos magueyes han muerto.
Años
Finalizó que el maguey es una planta que solamente crece por el método de cultivo temporal, por lo que el cambio climático también ha generado que su crecimiento no sea el mismo. Anteriormente sus cosechas tardaban entre siete a 10 años en cultivarse, ahora, por la falta de agua están tardando casi 12 años para poder disfrutar su cosecha, así como su producción antes duraban tres a cuatro meses y ahora solo están durando unas cuantas semanas.