FOTO: Ángel Rodríguez
Algunas técnicas textiles de los pueblos originarios se han ido perdiendo debido a la falta de interés de las nuevas generaciones, además de lo costoso que es realizar los trajes típicos sin que haya una demanda comercial, consideró el maestro Juan Carlos Sosa Martínez, dueño de la colección privada de trajes e indumentaria de la exposición “Manos de mi pueblo: Tejiendo Colores y Danza”.
Mencionó qué hay trajes que pueden costar su elaboración desde 3 mil o 4 mil pesos y hasta 20 mil pesos el traje completo, además que consideró que como mexicanos se deberían de consumir más dichos productos.
«Va pasando el tiempo y entonces a los hijos ya no les interesa aprender las técnicas o la elaboración de los textiles, entonces si se van perdiendo, hay unas técnicas que no se elaboran», lamentó.
Así lo mencionó en el marco de la presentación de la exposición Manos de mi pueblo: Tejiendo Colores y Danza que se llevará a cabo del 25 de febrero al 31 de marzo en el Centro de Arte Bernardo Quintana de la UAQ.
La colección está conformada por 50 trajes e indumentaria de diferentes partes del país, prendas que se han adquirido a lo largo de 12 años.
Por último, Sosa Martínez consideró que la gente debe valorar el sentido de la elaboración de estos trajes, porque son prendas que tardan hasta meses en confeccionarse; así como que la gente lo consuma y apoye a los pueblos indígenas, a los artesanos, no solo en la elaboración textil, sino en todos los oficios que desde generación en generación se pasan.