Mientras algunas familias tienen disponibilidad del agua durante casi todo el día, otras deben comprarla a particulares, con gastos superiores a dos mil pesos mensuales
El impulso de Bernal, en Ezequiel Montes, como Pueblo Mágico, a partir del 2006, incrementó el flujo de turistas y el crecimiento de comercios para la prestación de servicios; pero, si bien esto ha favorecido oportunidades de desarrollo económico para los pobladores, también generó el aumento en la demanda de un recurso elemental: el agua.
Desde hace más de dos meses, habitantes de esta delegación de Ezequiel Montes han tenido complicaciones para acceder al líquido; mientras algunas familias tienen disponibilidad del agua durante casi todo el día, otras deben comprarla a particulares, con gastos superiores a dos mil pesos mensuales.
Aunque en esta zona del semidesierto es habitual la carencia del agua potable durante la temporada que abarca desde marzo hasta junio, este año la situación ha sido diferente: por casi ocho semanas, lo único que ha llegado a las tuberías de los barrios circundantes de Bernal, es aire.
María Guadalupe López creció en el Barrio El Puerto, a las faldas del monolito que caracteriza al pueblo; este barrio es una de las zonas más afectadas por la falta de agua.
“Pues cada año se ha dado la situación de que lo que es comenzando la Semana Santa por tiempo, sí no ha fallado un poco el agua, pero no tanto como ahora, ahora sí a partir de Semana Santa nos la recortaron, pero después ya fue más, y no como años pasados, de que nada más en la temporada de Semana Santa nos la recortaban un poquito y luego nos la reestablecían”, denunció María Guadalupe López.
Recurren a empresas privadas
Al reconocer la problemática de abasto, las autoridades de la CEA, en coordinación con las autoridades locales, han surtido con pipas las cisternas ubicadas en esta delegación para bombear el agua a través de la red. Pese a que la alcaldesa, Magda Guadalupe Pérez, rechazó que haya desabasto en la zona, los habitantes de este barrio y otros de Bernal, no tienen acceso al agua si no es comprada.
«Pues así sin agua, tenemos aproximadamente unos dos meses, anteriormente comenzando Semana Santa nos abastecían un poco el agua, pero no era tanto como ahora, ahora sí desde Semana Santa nos han dejado sin agua, nos llegaba un poquito, pero ahora sí después de Semana Santa nos volvieron a dejar, pero ahora sí definitivamente sin agua, luego hay veces que sí llegan a rebombear pero se viene todo cuesta abajo, y lo que somos nosotros en la parte alta, pues no nos llega el agua, lo que es en el Callejón del Cuervito no nos llega el agua y lo que es un una parte de calle Corregidora y el Manantial, no nos llega el agua, lo mismo que está en alto y la red no alcanza a abastecer el agua», destacó la vecina.
A través de medios de comunicación locales, el vocal ejecutivo de la CEA, Luis Alberto Vega Ricoy, señaló que el pozo que dota a Bernal tiende al abatimiento, sin embargo, ante los pobladores no han informado debidamente las causas de las irregularidades en el servicio.
La distribución del agua ha sido primordialmente para los comercios céntricos, debido a la vocación turística de la zona y la demanda del recurso por parte de los visitantes.
Se recortó vida útil del pozo
El crecimiento de la delegación durante más de 15 años redujo la vida útil del pozo, que fue desarrollado a principios de la década de 1990. Así, este pozo pasó de tener capacidad de dotar hasta 68 litros por segundo, a suministrar 34 litros por segundo, según datos que el administrador local del organismo estatal compartió con los habitantes. Por ello, quienes más han padecido este desabasto, hicieron el llamado para que las autoridades limiten el crecimiento y cambios de uso de suelo en Bernal, para prevenir que la crisis agrave aún más.
El aumento de comercios, hoteles, restaurantes y otros giros similares dificulta el abasto incluso a las empresas de servicios ya existentes, quienes también han debido comprar pipas de manera adicional al suministro que dota la CEA. Benancio Uribe, quien habita en el centro de la delegación, señaló que la capacidad para dar los servicios básicos a quienes visitan Bernal, ya rebasa la disponibilidad del agua.
Sin solución a largo plazo
La respuesta que ha dado la Comisión Estatal de Agua en torno a esta problemática les resulta insuficiente, pues no han planteado formalmente una solución a largo plazo.
Además, las medidas tomadas no han sido suficientes e incluso, han incurrido en irresponsabilidades al descuidar la cisterna que abastece a la delegación, ya que, en diversas ocasiones, el agua es derramada hacia la zona cerril, mientras en los barrios de la zona alta no alcanza.