Con este incremento en el producto, ahora tienen que prever cuánto podrían aumentar sus precios para que no pegue en la clientela
La inflación ha impactado a restauranteros debido a que su planeación anual la estiman entre un 3 y 4%, pero el llegar hasta el 7% los hace desequilibrarse en los costos de su menú y gastos de operación; lo que hace que tengan que ingeniárselas para que no se refleje tanto en el bolsillo del comensal; sin embargo, les ha llegado a afectar en sus ventas, indicó el presidente del Consejo Queretano de Restauranteros A. C., en San Juan del Río, Antonio Rosas Carapia.
Con este incremento en el producto, ahora tienen que prever cuánto podrían aumentar sus precios para que no pegue en la clientela, pues la mayoría de ellos ubica perfectamente los costos de cada establecimiento y toma la decisión de ir por lo mismo. «Nos afecta porque tu planeación la haces con la estimación del 3 al 4% de inflación aproximadamente. Entonces, tu proyecto de inventarios, de costos, de sueldos, de inversión, de remodelación, etcétera; todo eso ya no funciona, porque ya se inflaron. Entonces, imagínate nada más cuando tengas una proyección de inversión que estás haciendo una remodelación o que compraste algún insumo que estás usando a un costo. Y ahora le pusiste un precio y ese precio ya no te está dando la utilidad que planeabas o que querías. tenemos qué estar constantemente los precios en la carta, pero eso no es nada sano para el comensal», comentó Rosas Carapia.
Señaló que puede variar la afectación en costos dependiendo del giro del negocio, y para que no se vea un impacto mayor deben buscar el modo de no subir tanto los precios; sin embargo, el comensal nota la diferencia, y esto les llega a pegar en sus ventas, sobre todo entre semana. Finalmente, señaló que la inflación no sólo repercute en los restauranteros, pues más de 80 proveedores dependen también de estos negocios, y al ser toda una cadena la afectación es mayor.