• 8 de mayo de 2024 4:22 PM

Naciones se oponen a data centers: Querétaro recibe uno en Colón

PorJovana Espinosa

Sep 27, 2023

La Legislatura del Estado de Querétaro aprobó que el Gobierno del Estado, encabezado por Mauricio Kuri González, desincorpore un predio con valor de $300 millones de pesos para la instalación de un Complejo de Data Center para la empresa CloudHQ en el municipio de Colón: un tipo de instalaciones que son rechazadas a nivel mundial por sus efectos negativos en el consumo de agua y energía eléctrica y las implicaciones medioambientales que consigo traen para las zonas donde se instalan.

Los data centers son complejos llenos de computadoras en las que se almacenan todos los documentos, fotografías, videos y demás archivos que los usuarios de tecnología guardan ‘en la nube’. Uno instalado en Mesa, Arizona, requiere de 4.7 millones de litros diarios de agua para refrigerar las computadoras que contiene. No obstante, tanto el gobernador de Querétaro como Marco Del Prete, titular de la Secretaría de Desarrollo Sustentable (Sedesu) del Estado defienden que el centro creará más de 600 empleos de tiempo completo y 1 mil 250 empleos temporales y niegan que este tipo de centros consuman altas cantidades de agua, aunque en Chile uno incluso llega a recurrir a agua salada para su funcionamiento.

 

Tierra en bandeja de plata

El pasado 12 de septiembre la Legislatura del estado aprobó el decreto que autoriza al Poder Ejecutivo del Estado a desincorporar un predio para que la empresa CHQ Development S de R. L. de C. V, o Cloud HQ, construya en él un nuevo complejo de centro de datos, denominado Complejo Data Centers Colón.

El predio que se desincorporó y enajenó con titularidad onerosa es un inmueble con extensión de 518 mil 470.545 metros cuadrados y clave catastral 050302201024016 con valor de $303 millones 305 mil 268.83 pesos, que está ubicado en la carretera estatal 100 El Colorado-Higuerillas, en el municipio de Colón. Este fue incorporado a un fideicomiso para que la empresa CloudHQ invierta en la construcción de este nuevo complejo.

 

El proyecto, que ha causado mucha polémica consiste, en la creación de un campus de centros de datos compuesto por seis edificios de centros de datos, cada uno con una capacidad de potencia de carga de tecnologías de la información de hasta 48 megawatts y una subestación eléctrica. La empresa deberá de comenzar con los trámites a más tardar en el primer trimestre del año 2024, de acuerdo con el decreto publicado en el Periódico Oficial La Sombra de Arteaga el pasado 15 de septiembre.

 

$70,000,000,000

Las autoridades estatales han subrayado los beneficios del mismo con una inversión de más de $70 mil millones de pesos, así como la generación de más de 600 empleos de tiempo completo y 1,250 empleos temporales.

 

Negocio para constructoras

Las autoridades de Querétaro afirman que la ejecución del proyecto Complejo Data Centers Colón permitirá la atracción de inversiones adicionales de aproximadamente $12 mil 888 millones de pesos en construcción y el desarrollo de cadena de suministros relacionados con su operación, generando así oportunidades laborales en servicios por ende el crecimiento de la economía local.

 

Justificación por predio

El secretario de Desarrollo Sustentable, Marco Antonio Del Prete, indicó que esos eran suficientes beneficios para realizar la transacción, negando que esto fuera una donación, sino que era el aporte que el gobierno hacía y que el beneficio a largo plazo sería que cuando dejara de funcionar el centro el estado podría quedarse con el predio y la construcción.

Las autoridades también han subrayado que CloudHQ, cuenta con 12 campus globales y se destaca en el diseño, desarrollo y operación de los mejores centros de datos de hiperescala, pero han negado que tenga algunas consecuencias negativas al medioambiente, como en el consumo del agua.

Al ser cuestionado, Marco Del Prete reconoció el gasto energético, pero indicó que es algo que se resolverá con la subestación, proyecto que la Agencia de Energía ya trabaja y que es parte de la justificación por la que el gobierno estatal adquirió una deuda de $3 mil 300 millones de pesos. Mientras que, para el gasto de agua, Marco Del Prete afirmó es falso que un data center tenga consumos excesivos en agua, al contrario de empresas de la industria de la transformación.

 

Evidencias contra dichos

No obstante, la realidad mundial es otra. Los Centros de Datos son rechazados y cuestionados en los lugares donde son instalados por sus efectos negativos en el consumo de agua y energía, que provocan apagones y escasez en muchos lugares; además de que en ocasiones tienen efectos negativos en el suelo, flora y fauna de las localidades.

 

Un desierto más seco en Arizona

La mayor preocupación en la mayoría de las comunidades es el agua, según lo reportó NBC News en Arizona, ahí se señalaba que el gasto de agua de un complejo similar al que será instalado en Querétaro requiere de 1.25 millones de galones de agua al día, una preocupación que crece entre la población.

Aunque las oficinas podrían requerir el consumo común de agua de oficinas de cualquier otra índole, para el enfriamiento de los servidores se requieren equipos especiales de refrigeración que necesitan grandes cantidades de agua para funcionar.

En Estados Unidos hay un creciente número de personas que están expresando preocupaciones sobre la proliferación de centros de datos, que consumen electricidad y agua, mientras crean relativamente pocos empleos, algo que afecta a zonas azotadas por la sequía, como lo señala el artículo.

Incluso detalla que “Investigadores de la Universidad de Virginia estiman que una quinta parte de los centros de datos extraen agua de cuencas hidrográficas moderada a altamente estresadas, en su mayoría en el oeste de Estados Unidos”, indica el artículo.

La problemática es grave, incluso la revista científica Nature ha publicado artículos sobre el consumo de agua anual de los data center que dan servicio a Google y Microsoft, siendo Google quien más ha consumido hasta el 2019.

 

 

Oposición popular

El panorama no cambia en América Latina como Chile y Uruguay, en donde la gente ha salido a manifestarse a las calles en mayo del 2023, luego de que se diera a conocer un plan para construir un centro de datos de Google que utilizará millones de litros de agua al día mientras que Uruguay está sufriendo su peor sequía en 74 años, utilizando incluso agua salada para el suministro, tal como lo reportaron medios nacionales e internacionales.

 

A Juicio

Mientras que en Chile la oposición de los ciudadanos de la comunidad de Los Cerrillos llegó incluso a la corte en 2021, cuando la municipalidad de la comunidad presentó una reclamación ante el Tribunal Ambiental de Santiago en contra de la resolución que aprobó el proyecto de construcción del nuevo centro de datos de Google en ese país con una inversión de $200 millones de dólares, debido al consumo de agua que requieren sus terminales para el sistema de enfriamiento.

 

ONGs se oponen en Europa

En Europa la problemática es la misma, incluso se han creado organizaciones civiles dedicadas especialmente en advertir sobre las consecuencias climáticas de la instalación de los centros de datos, tales como “Tu Nube Seca mi Río”, que se ha opuesto a la instalación de diversos centros y advierten de daños también a la flora y fauna tal es el caso del centro de datos de Meta Talavera de la Reina, que pone en peligro el águila imperial y el buitre leonado, por la zona donde desean instalar el centro de datos.

 

Más daño que beneficio

Así mismo, hay diversas investigaciones científicas a nivel mundial respecto a los impactos negativos al medioambiente y sobre los posibles beneficios económicos o de generación de empleos, la devastación a los recursos naturales de las zonas es predominante.

 

Querétaro, ¿Qué esperar?

En Querétaro y en general en México aún no hay resistencia contra estos centros de datos y las autoridades tienden a resaltar solo los beneficios económicos de este tipo de industrias, algo similar a lo que ocurrió con una desincorporación de un predio de 78 hectáreas en 2007 para la creación del Parque Aeroespacial, a un lado del Aeropuerto Internacional de Querétaro, que albergaría alrededor de 30 empresas del sector aeroespacial y que subrayaban crearía alrededor de 6,000 empleos, de acuerdo al secretario de Desarrollo Sustentable, Marco Antonio del Prete.

Al paso de los años, a pesar del crecimiento de las empresas y el impacto positivo en el empleo, la comunidad donde se ubica este parque Galeras, no ha experimentado un desarrollo paralelo. La llegada de la industria aeroespacial ha generado una mayor demanda de empleo, lo que ha atraído a trabajadores de diferentes partes del país a la zona. Sin embargo, esta afluencia de población ha ejercido una presión considerable sobre la infraestructura local y los servicios básicos. La vivienda se ha vuelto más escasa y costosa, lo que dificulta el acceso a la misma para los residentes locales. Los servicios públicos, como el suministro de agua y la electricidad, a menudo no han logrado mantenerse al ritmo de la creciente población, lo que ha llevado a cortes frecuentes de agua potable y problemas con el suministro de electricidad.

Además, el sistema educativo local ha enfrentado desafíos para atender a la creciente población, lo que ha afectado la calidad de la educación en la zona. Y a pesar de la generación de empleo, la población de Galeras sigue experimentando altos índices de pobreza, lo que indica la necesidad de una atención más integral para abordar estos desafíos en términos de infraestructura y servicios básicos, tal como lo ha reportado Presencia Universitaria dentro del reportaje “Despegó la industria aeroespacial en Querétaro, pero Galeras no”, de Cecilia Conde.

Jovana Espinosa

Soy periodista desde hace 15 años, enfocada en medios radiofónicos, en los que soy reportera y conductora. Egresada de la Licenciatura de Comunicación y Periodismo de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), con diplomado en Feminismos Críticos para la Participación Política. El periodismo ha sido una forma de buscar cambiar las realidades que no me gustan. Me he especializado en Periodismo con Perspectiva de Género. Pertenezco a la Red Nacional de Periodistas con Perspectiva de Género y a la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género. Creo en una sociedad más justa, por eso también hago activismo en mi tiempo libre, especialmente en temas de Derechos Humanos y equidad de género.