Después de que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador indicará que la curva epidemiológica de COVID registra un descenso, la secretaria de Salud en el Estado de Querétaro, Martina Pérez Rendón, señaló que la población no debe confiarse, pues no hay certeza del comportamiento del virus, ya que éste ha sido muy engañoso.
«La invitación es a que no nos confiamos, este virus ha dado grandes sorpresas y pudiera ser que pensemos que ya vamos de salida, relajemos las medidas y volvamos a tener un repunte, cada estado nos comportamos de manera distinta, ahorita si en la última semana parece que hay un descenso, no tan importante, él hablaba de un descenso, en el caso de Querétaro no es tan importante todavía ese descenso, entonces la invitación es a que nos mantengamos alerta cuidándonos».
Asimismo, ante la llegada del primer caso que se detectó de la variante OMICRÓN, BA.2 en México, mencionó hasta el momento no hay datos de qué tanto pudiera afectar, pero por ello se mantienen alerta, pues aunque no hay saturación en hospitales, sí ha afectado en general en la salud de la población.
«El comportamiento clínico insisto, o sea que nos va orientando aún cuando no teníamos todavía en algún momento, les comentaba yo que teníamos dos casos con alta probabilidad de que fueran OMICRÓN, de ésos después ya nos informaron que sí eran y luego ya subió a 20, el comportamiento clínico es muy importante, de momento no tenemos un comportamiento clínico distinto a que nos alerte que vamos a tener casos más de este tipo en este momento, pero vuelvo a insistir, algo muy importante es que este virus todos los días cambia y todos los días aparece algo nuevo, nos mantenemos alerta, un parámetro que nos habla mucho de la gravedad pues es la ocupación hospitalaria, tampoco tenemos una ocupación explosiva que nos pueda hablar de que está presente esta variante en el país, y sobre todo que bueno esto apenas empieza a documentar, se acuerdan con OMICRÓN, al principio incluso hasta se hablaba que era como muy relajado el asunto, cuando empezamos a ver que era sumamente contagioso y que había afectado tal vez no la ocupación hospitalaria pero si la vida laboral, porque hay un gran número de personas con incapacidad».