Explicaron que se realizó de una manera precipitada, pues las trasplantaciones de árboles requieren alrededor de 7 años de planeación
Alrededor de 50 árboles extraídos por las obras del Gobierno del Estado de Querétaro en avenida 5 de Febrero podrían perecer por la manera en que fueron tratados al retirarlos y porque actualmente es otoño, advirtieron Ángel Reyes y Daniel Vizcaya, integrantes del programa Qrotectores, quienes explicaron que se realizó de una manera precipitada, pues las trasplantaciones de árboles requieren alrededor de 7 años de planeación, o al menos de 1 a 3 para preservar la vida de los ejemplares. Ambos instalaron un campamento en la avenida capitolina de Zaragoza a modo de protesta.
“Es que para que un árbol sea trasplantado correctamente mínimo debe tener de 1 a 3 años de anticipación para así poder asegurar su trasplante y eso no es tan seguro, lo recomendable es 7 años para que se pueda hacer la correcta trasplantación”, explicó Ángel Reyes.
Aunado a ello, la maquinaria con la que se realizó la extracción no fue adecuada y los árboles resultaron considerablemente dañados; lo que podría incrementar sus posibilidades de morir. Daniel Vizcaya, otro campista, comentó que el otoño es una época dónde se reduce la posibilidad de que el trasplante sea exitoso, cuestión que les preocupa.
“Entendemos que es otoño y es una época muy difícil para trasplantar un árbol de hecho el índice de supervivencia baja demasiado a un 40 %, entonces sí quisiéramos que también se diera la oportunidad de estos árboles de poder seguir sobreviviendo y también estamos aquí para dar información a la comunidad“, resaltó Daniel Vizcaya.
Se conoce que un poco más de 50 ejemplares fueron removidos con este programa. Algunos de ellos irán a la reserva de El Tlacuache del municipio de Querétaro.