El presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) en la LXI legislatura local, Guillermo Vega, hizo un llamado a sus compañeros legisladores que tienen interés en presidir la Mesa Directiva, a ponerse a hacer campaña y evitar tensiones y lograr consenso. Pese a que el cambio de la presidencia debe darse durante los primeros días de abril, este asunto aún no se ha puesto sobre la mesa debido a que nadie ha mostrado su interés formal.
Memo Vega pidió que se evite llegar a momentos de tensión como se vivieron al elegir la primera Mesa Directiva, iniciando los consensos anticipadamente para llegar con respaldo al momento de la elección. El legislador destacó la importancia de que quienes aspiren a la presidencia de la Mesa Directiva sean perfiles abiertos al diálogo y capaces de generar unidad, pues la nueva dirigencia enfrentará retos clave, como el informe del gobernador, la glosa con los secretarios y posibles reformas federales.
Balanza
Contrario a señalamientos que ha habido por parte de algunos legisladores respecto a la actual mesa directiva, Guillermo Vega dijo que Andrea Tovar rompió prejuicios sobre el manejo partidista de la presidencia «sin jalar la cobija para un solo lado», y calificó su gestión como prudente e institucional.
Sobre la posible participación de representantes de la 4T en la próxima Mesa Directiva, aclaró que la ley establece que el presidente no puede ser de Morena (ya que la actual presidenta pertenece a este partido), pero no se descarta la presencia de integrantes de otro partido pertenecientes a la 4T.
Recordó que quien busque llegar al cargo, debe hacer campaña y convencer a los demás de apoyarlo, ya que puntualizó que no se trata de decisiones cupulares, sino de quien logre aglutinar apoyo.
Guillermo Vega dijo que aunque el plazo para realizar el cambio de dirigencia es el 1º de abril, de no haber acuerdo, el proceso podría extenderse algunos días sin problema, ya que la actual Mesa Directiva continuaría en funciones. Respecto al género del próximo presidente, Vega explicó que, si bien algunas voces sugieren que debe ser hombre, el principio de paridad permite que sea nuevamente una mujer.