No hay marcha atrás a las medidas de seguridad implementadas en el Congreso del Estado, aseguró el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Ángeles Herrera. El 24 de marzo se pusieron en operación las medidas de seguridad en el acceso de la LXI Legislatura local, entre las que se encuentran arcos detectores de metal y torniquetes que se abren únicamente con una tarjeta o la huella digital.
Ante esta medida, ha habido múltiples voces que se han pronunciado en contra de que «se cierre la casa del pueblo», pese a ello, el dirigente de la Mesa Directiva dijo que no se dejarán de usar estas medidas.
“Yo creo que la seguridad está funcionando muy bien en el Congreso, ni un paso para atrás. Las cosas están funcionando bien aquí en el Congreso. Estamos organizados. Me llama la atención como algunos que opinan diferente, la semana pasada estuvieron en San Lázaro, en México, hicieron 28 filtros de seguridad y no dicen nada. Y hoy aquí en el congreso que piden el INE y te piden tu nombre y ver a dónde vas, se les hace un gran escándalo”; afirmó Gerardo Ángeles.
Se quedan
Los diputados de Morena han sido de los principales opositores a estas medidas de seguridad, por lo que el coordinador de la bancada de este partido en el Congreso, Edgar Inzunza Ballesteros, dijo que ingresaría un documento para solicitar que se vuelva a abrir “la casa del pueblo” y que se retiren los torniquetes. Sin embargo, Gerardo Ángeles aseguró que los torniquetes y las medidas de seguridad implementadas funcionan adecuadamente y «por supuesto que se quedan».
Es de recordar que fue la diputada de Movimiento Ciudadano, Teresita Calzada, presidenta de la Comisión de Seguridad Pública y Protección Civil del Congreso de Querétaro, quien promovió esta medida para comenzar a utilizar la infraestructura de seguridad que se instaló desde la pasada Legislatura y que no se había puesto en operación. La instalación de esta infraestructura de seguridad fue en abril de 2024 y en ese entonces se invirtieron $1 millón 994 mil 412 pesos.